No será la última vez que ocurra en la Argentina que un negocio, en principio redituable, luego de la masificación se convierta en algo obvio, se multiplique y se extienda cual pandemia por cada rincón del país. Y sí, pasó con las canchas de paddle, drugstores, videojuegos, videoclub, pubs irlandeses?¿, agencia de remises, locutorios, etc…etc. Todo llega pero??? en algunos lugares con mayor celeridad que en otros.

Ocurrió, aquí en Balcarce, la ciudad que ocupa mi atención durante este verano. Hace tres años, no existían los cybers. Sólo uno o dos locutorios habían dispuesto unas viejas PCs que eran utilizadas por los foráneos, por aquellos que recibían ansiosos mails de sus parientes exiliados por la mala economía o por unos pocos que ya se habían subido al puente de la tecnología. Cabe además aclarar que había que tomar coraje para utilizar el servicio, ya que el valor de la hora era de 4 pesos, mientras que a 40 minutos de distancia, en Mar del Plata, por 1,50 se navegaba en paz.

Pero pasó que en el 2004, a alguien se le ocurrió abrir un cyber y luego otro, y otro más… y hoy son la perdición de los chicos. En poco menos de un año, hay más de un veintena, en una ciudad donde viven unos 40 mil habitantes contando la población rural y donde en invierno baja notablemente la circulación por las calles cansinas del pueblo. Es notable que por estos días, a partir de las 6 de la tarde, encontrar una máquina disponible sea una verdadera misión imposible. El chat y los juegos en red son las actividades vedettes de la tarde balcarceña. Los jóvenes, mayoría de los usuarios- se apilan en las puertas de los locales esperando su turno para divertirse. Y sí, el fenómeno es la comidilla de los mayores, «se la pasan todo la tarde metidos en las maquinitas!», escuché decir por ahí a una señora.

En fin, todo llega. Podría haber sido antes, pero aquí a 400 Km. de la Capital llegó hace poco la movida, cyber, Internet y todos están obsesionados. Aquí también fueron rotando los mencionados super negocios y al mismo tiempo fueron cerrando otros comercios, al parecer menos redituables, un ejemplo???? en la ciudad de Balcarce ya no queda en pie ni una sola librería.

Actualización Verano 2008: Más de la mitad de estos cybers cerraron. Y la conexión desde un domicilio particular sigue siendo cara.